Al menos 30 detenidos dejan incidentes en medio de paro de choferes de SuBus
Un saldo preliminar de 30 detenidos dejan los incidentes registrados esta mañana en los terminales de la empresa SuBus, luego que más de 1.300 choferes del sindicato número 1 paralizaran desde las cero horas en demanda de mejoras salariales y otras condiciones laborales.
En La Pintana, donde se concentran unas 200 máquinas de la firma, hubo cinco aprehendidos, a los que se suman 24 en Quilicura y uno más arrestado por daños a una de las micros. Este último será formalizado en las próximas horas.
Los incidentes más graves se produjeron a la altura del paradero 44 de Santa Rosa, en el terminal de La Pintana, donde Carabineros actuó con carros lanzaagua y bombas lacrimógenas mientras los conductores en paro les lanzaban piedras y otros objetos contundentes.
La movilización impedía el libre flujo del tránsito y buscaba evitar que salieran del lugar las máquinas de la empresa, las que prestan cobertura a un sector amplio de la capital, el que incluye el eje troncal de Vicuña Mackenna por las comunas de Puente Alto, La Florida, luego el centro de Santiago y finalmente Independencia y Recoleta.
El mayor de Carabineros Rodrigo Cerda, encargado de la seguridad en el lugar, aseguró que "la misión nuestra era dialogar, se agotó el diálogo, se despejó la salida, en estos momentos está viendo la empresa si va a sacar buses o no, esa es una decisión de la empresa, la vía está despejada, Santa Rosa está resguardada, no hay ningún problema".
El uniformado indicó que el diálogo se dio por agotado en el momento en que los trabajadores se sentaron en las inmediaciones del terminal de La Pintana, dando la señal de que no se moverían del lugar.
Tras la acción de la fuerza policial se logró cierta normalidad y se restableció el tránsito para vehículos particulares. No obstante, ninguno de los buses logró salir.
Pasadas las 8.30 de la mañana, choferes que se encontraban dentro de ese terminal y que no pertenecen al sindicato en paro salieron de la garita para solidarizar con sus compañeros, ya que consideraron que la fuerza policial fue excesiva.
Varios buses intentaron salir e incluso se colocaron en línea frente a las rejas, no obstante, minutos más tarde las máquinas dieron la vuelta hacia el interior.
En Quilicura, en tanto, un bus fue apedreado temprano cuando intentaba salir a hacer su recorrido con un conductor extra contratado por la firma. También se informó que posteriormente salieron unas 40 máquinas las que debieron devolverse con serios daños en su estructura al ser atacadas en el camino.
Además de La Pintana y Quilicura, SuBus tiene terminales en las comunas de San Bernardo y Huechuraba. Según indicaron los choferes, la paralización -que afectaría a cerca de un millón de pasajeros- tendría una adhesión de 100%.
En La Pintana, donde se concentran unas 200 máquinas de la firma, hubo cinco aprehendidos, a los que se suman 24 en Quilicura y uno más arrestado por daños a una de las micros. Este último será formalizado en las próximas horas.
Los incidentes más graves se produjeron a la altura del paradero 44 de Santa Rosa, en el terminal de La Pintana, donde Carabineros actuó con carros lanzaagua y bombas lacrimógenas mientras los conductores en paro les lanzaban piedras y otros objetos contundentes.
La movilización impedía el libre flujo del tránsito y buscaba evitar que salieran del lugar las máquinas de la empresa, las que prestan cobertura a un sector amplio de la capital, el que incluye el eje troncal de Vicuña Mackenna por las comunas de Puente Alto, La Florida, luego el centro de Santiago y finalmente Independencia y Recoleta.
El mayor de Carabineros Rodrigo Cerda, encargado de la seguridad en el lugar, aseguró que "la misión nuestra era dialogar, se agotó el diálogo, se despejó la salida, en estos momentos está viendo la empresa si va a sacar buses o no, esa es una decisión de la empresa, la vía está despejada, Santa Rosa está resguardada, no hay ningún problema".
El uniformado indicó que el diálogo se dio por agotado en el momento en que los trabajadores se sentaron en las inmediaciones del terminal de La Pintana, dando la señal de que no se moverían del lugar.
Tras la acción de la fuerza policial se logró cierta normalidad y se restableció el tránsito para vehículos particulares. No obstante, ninguno de los buses logró salir.
Pasadas las 8.30 de la mañana, choferes que se encontraban dentro de ese terminal y que no pertenecen al sindicato en paro salieron de la garita para solidarizar con sus compañeros, ya que consideraron que la fuerza policial fue excesiva.
Varios buses intentaron salir e incluso se colocaron en línea frente a las rejas, no obstante, minutos más tarde las máquinas dieron la vuelta hacia el interior.
En Quilicura, en tanto, un bus fue apedreado temprano cuando intentaba salir a hacer su recorrido con un conductor extra contratado por la firma. También se informó que posteriormente salieron unas 40 máquinas las que debieron devolverse con serios daños en su estructura al ser atacadas en el camino.
Además de La Pintana y Quilicura, SuBus tiene terminales en las comunas de San Bernardo y Huechuraba. Según indicaron los choferes, la paralización -que afectaría a cerca de un millón de pasajeros- tendría una adhesión de 100%.
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