Chile Ganó 3-2 a Ecuador en su debut en Copa America 2007
PUERTO ORDAZ, junio 27.- Una gran victoria consiguió Chile en su estreno en la Copa América, venciendo a Ecuador por 3-2 en los últimos minutos del encuentro.
La Roja tuvo una gran reacción a partir del ingreso de Carlos Villanueva en el 73, quien fue el héroe de la jornada anotando el tanto del triunfo con un preciso tiro libre.
Antes Humberto Suazo había remontado dos veces (en los minutos 19 y 79) los tantos del elenco rival, que celebraron mediante Valencia (15) y Benítez (22).
TRES GOLES EN OCHO MINUTOSEn el arranque Chile comenzó mejor. De hecho, los primeros 10 minutos creó algunas opciones en el arco rival. La profundidad de Valdivia y una aproximación de Navia fueron "alarma" para los del Guayas.
Claro que la primera preocupación real del pleito fue una falta de Vargas en el minuto 12, que le permitió a los ecuatorianos un lanzamiento a 18 metros del arco de Bravo.
El remate dio en la barrera y Tenorio que casi convierte de rebote. La jugada le costó amarilla a Potencia.
Tras cartón, en el 15 Matías Fernández -que justificó el estar sin chispa- estuvo a punto con un disparo de lanzamiento libre desde la orilla, luego de una gran corrida de Mark González, que le valió tarjeta a De La Cruz.
Sólo un minuto después vino el gol de Ecuador. Benítez recibió al medio, envió un gran pase en profundidad para Valencia y éste definió solo con un sutil tiro sobre el cuerpo del meta chileno.
A la Roja le costó sólo cuatro minutos conectarse. Y es que Suazo -a la postre el mejor de Chile- igualó con un golazo. Hizo la pared con Valdivia y se despachó un zurdazo violentísimo, que se coló en el ángulo derecho del cuidapalos Mora.
Pero vino lo increíble. En el 23 un centro fue cabeceado por Tenorio, la bola dio un bote en el área con un Bravo que casi no opuso resistencia y Benítez metió la cabeza en el segundo palo, ganándole la posición a un desesperado Vargas, que intentó rechazar de chilena.
De ahí en más los ecuatorianos intentaron tocar más el balón para evitar que el elenco de Acosta volviera a empatar rápidamente, aunque Navia tuvo una buena posibilidad tras habilitación de Valdivia en el 31 -que luego se fue diluyendo-, pero el atacante no le dio bien y llegó fácil a las manos de Mora.
Y en el 33 se salvó Chile. Más bien el vertical derecho fue el aliado de la Roja. Esto ya que Valencia le dio desde 25 metros y su disparo pegó caprichosamente en el parante de un batido meta nacional.
Claro que en los 37 el combinado criollo pudo igualar. Sanhueza metió un gran pase para un delantero mentiroso como Meléndez, pero Kalule no definió bien solo ante Mora. Pudo aprovechar mejor la opción dándola a Suazo, pero prefirió rematar. El arquero salvó en doble instancia.
En el 40 una nueva desinteligencia en la defensa chilena -por enésima vez en el lado de Mark González- le permitió a Ulises de la Cruz entrar como "Pedro por su casa", aunque su centro-remate dio en un compañero y salió apenas desviado.
Con muchas dudas Chile terminó la primera etapa. Y en desventaja gracias a las licencias que entregó la parte posterior, que no logró coordinarse de la mejor manera.
VOLVIENDO AL 3-5-2En el complemento Nelson Acosta se dio cuenta de sus errores y trató de reestructurar el equipo, poniendo a Riffo como líbero -entró por un deslucido Mati Fernández y rindió a la perfección- y a Lorca -que fue vital- por un opaco Navia.
Así Mark González y Álvaro Ormeño quedaron más libres para descolgarse por las bandas y la fisonomía de la trizada retaguardia se reorganizó con un patrón en el fondo.
Ni así pudieron evitar el aviso ecuatoriano en el 52. Un centro pasado casi lo conecta Edwin Tenorio, ante una dubitativa defensa nacional.
Y Chile que no despavilaba. De hecho, en el 58 Bravo salvó el tercero. Con un Ecuador mucho más ordenado Valencia lo tuvo, pero su disparo cruzado fue contenido por el meta de la Real Sociedad. Hasta ahí Chile mostraba desorientación.
En el 61 el meta nacional comenzó a convertirse en figura. Tenorio ganó un centro y una reacción felina del meta criollo otra vez ahogó las gargantas de los jugadores del Guayas, que a esa altura eran muy superiores.
En el 64 estuvo el empate de Chile, pero Suazo falló inexplicablemente. Un error de Iván Hurtado en el rechazo dejó solo al Pelado ante Mora, que en vez de fusilar al ecuatoriano optó por un "Globito". El cálculo falló por centímetros. El Chupete no lo creía.
En el 71 recién la Roja volvió a preocupar. Ormeño ganó la línea de fondo y su centro fue conectado por Valdivia, pero el Mago le dio a las nubes desde la entrada del área.
En el 73 Acosta hizo el último cambio. Villanueva ingresó por Meléndez y así el calvo adiestrador se jugó su última carta, intentando darle más potencia a la ofensiva. Tener más la pelota fue la fórmula. Y le resultó.
Dos minutos después el jugador de Audax hizo algo que casi no intentó Chile en el partido. Remató de distancia y obligó a Mora a trabajar. Suazo estuvo a punto de llegar en el rebote.
Hasta que en el 80 vino el desahogo. Una gran jugada en el área de Lorca terminó en un centro preciso para el Chupete, que amortiguó con el pecho y fusiló al meta rival.
Otro tanto que demostró la estirpe goleadora del ariete del Monterrey, que tras el tanto sintió un tirón en el muslo y bajó las revoluciones.
Ecuador se descompuso y la Roja creció como nunca en el partido. Es más, un averiado Suazo casi desnivela en el 85. Esta vez el zurdazo se fue desviado por poco.
Y luego fue Valdivia. Ganó un tiro libre gracias a su fuerza y lo aprovechó de la mejor manera Villanueva. El zurdo la puso con fineza en un rincón imposible y celebró con todo.
Fue la "guinda de la torta". Porque cuando faltó fútbol Chile puso "garra". Lo demás fue aguantar. Y lo hizo de la mejor forma. La victoria fue el justo premio por la arremetida final por los dirigidos de Acosta, quien ganó el pleito con los cambios.
La Roja tuvo una gran reacción a partir del ingreso de Carlos Villanueva en el 73, quien fue el héroe de la jornada anotando el tanto del triunfo con un preciso tiro libre.
Antes Humberto Suazo había remontado dos veces (en los minutos 19 y 79) los tantos del elenco rival, que celebraron mediante Valencia (15) y Benítez (22).
TRES GOLES EN OCHO MINUTOSEn el arranque Chile comenzó mejor. De hecho, los primeros 10 minutos creó algunas opciones en el arco rival. La profundidad de Valdivia y una aproximación de Navia fueron "alarma" para los del Guayas.
Claro que la primera preocupación real del pleito fue una falta de Vargas en el minuto 12, que le permitió a los ecuatorianos un lanzamiento a 18 metros del arco de Bravo.
El remate dio en la barrera y Tenorio que casi convierte de rebote. La jugada le costó amarilla a Potencia.
Tras cartón, en el 15 Matías Fernández -que justificó el estar sin chispa- estuvo a punto con un disparo de lanzamiento libre desde la orilla, luego de una gran corrida de Mark González, que le valió tarjeta a De La Cruz.
Sólo un minuto después vino el gol de Ecuador. Benítez recibió al medio, envió un gran pase en profundidad para Valencia y éste definió solo con un sutil tiro sobre el cuerpo del meta chileno.
A la Roja le costó sólo cuatro minutos conectarse. Y es que Suazo -a la postre el mejor de Chile- igualó con un golazo. Hizo la pared con Valdivia y se despachó un zurdazo violentísimo, que se coló en el ángulo derecho del cuidapalos Mora.
Pero vino lo increíble. En el 23 un centro fue cabeceado por Tenorio, la bola dio un bote en el área con un Bravo que casi no opuso resistencia y Benítez metió la cabeza en el segundo palo, ganándole la posición a un desesperado Vargas, que intentó rechazar de chilena.
De ahí en más los ecuatorianos intentaron tocar más el balón para evitar que el elenco de Acosta volviera a empatar rápidamente, aunque Navia tuvo una buena posibilidad tras habilitación de Valdivia en el 31 -que luego se fue diluyendo-, pero el atacante no le dio bien y llegó fácil a las manos de Mora.
Y en el 33 se salvó Chile. Más bien el vertical derecho fue el aliado de la Roja. Esto ya que Valencia le dio desde 25 metros y su disparo pegó caprichosamente en el parante de un batido meta nacional.
Claro que en los 37 el combinado criollo pudo igualar. Sanhueza metió un gran pase para un delantero mentiroso como Meléndez, pero Kalule no definió bien solo ante Mora. Pudo aprovechar mejor la opción dándola a Suazo, pero prefirió rematar. El arquero salvó en doble instancia.
En el 40 una nueva desinteligencia en la defensa chilena -por enésima vez en el lado de Mark González- le permitió a Ulises de la Cruz entrar como "Pedro por su casa", aunque su centro-remate dio en un compañero y salió apenas desviado.
Con muchas dudas Chile terminó la primera etapa. Y en desventaja gracias a las licencias que entregó la parte posterior, que no logró coordinarse de la mejor manera.
VOLVIENDO AL 3-5-2En el complemento Nelson Acosta se dio cuenta de sus errores y trató de reestructurar el equipo, poniendo a Riffo como líbero -entró por un deslucido Mati Fernández y rindió a la perfección- y a Lorca -que fue vital- por un opaco Navia.
Así Mark González y Álvaro Ormeño quedaron más libres para descolgarse por las bandas y la fisonomía de la trizada retaguardia se reorganizó con un patrón en el fondo.
Ni así pudieron evitar el aviso ecuatoriano en el 52. Un centro pasado casi lo conecta Edwin Tenorio, ante una dubitativa defensa nacional.
Y Chile que no despavilaba. De hecho, en el 58 Bravo salvó el tercero. Con un Ecuador mucho más ordenado Valencia lo tuvo, pero su disparo cruzado fue contenido por el meta de la Real Sociedad. Hasta ahí Chile mostraba desorientación.
En el 61 el meta nacional comenzó a convertirse en figura. Tenorio ganó un centro y una reacción felina del meta criollo otra vez ahogó las gargantas de los jugadores del Guayas, que a esa altura eran muy superiores.
En el 64 estuvo el empate de Chile, pero Suazo falló inexplicablemente. Un error de Iván Hurtado en el rechazo dejó solo al Pelado ante Mora, que en vez de fusilar al ecuatoriano optó por un "Globito". El cálculo falló por centímetros. El Chupete no lo creía.
En el 71 recién la Roja volvió a preocupar. Ormeño ganó la línea de fondo y su centro fue conectado por Valdivia, pero el Mago le dio a las nubes desde la entrada del área.
En el 73 Acosta hizo el último cambio. Villanueva ingresó por Meléndez y así el calvo adiestrador se jugó su última carta, intentando darle más potencia a la ofensiva. Tener más la pelota fue la fórmula. Y le resultó.
Dos minutos después el jugador de Audax hizo algo que casi no intentó Chile en el partido. Remató de distancia y obligó a Mora a trabajar. Suazo estuvo a punto de llegar en el rebote.
Hasta que en el 80 vino el desahogo. Una gran jugada en el área de Lorca terminó en un centro preciso para el Chupete, que amortiguó con el pecho y fusiló al meta rival.
Otro tanto que demostró la estirpe goleadora del ariete del Monterrey, que tras el tanto sintió un tirón en el muslo y bajó las revoluciones.
Ecuador se descompuso y la Roja creció como nunca en el partido. Es más, un averiado Suazo casi desnivela en el 85. Esta vez el zurdazo se fue desviado por poco.
Y luego fue Valdivia. Ganó un tiro libre gracias a su fuerza y lo aprovechó de la mejor manera Villanueva. El zurdo la puso con fineza en un rincón imposible y celebró con todo.
Fue la "guinda de la torta". Porque cuando faltó fútbol Chile puso "garra". Lo demás fue aguantar. Y lo hizo de la mejor forma. La victoria fue el justo premio por la arremetida final por los dirigidos de Acosta, quien ganó el pleito con los cambios.
Terra.cl
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